arquitectura y construcción sustentable no exagerada

Bioconstrucción: un modelo sustentable para el futuro de la arquitectura

16-05-2025

La construcción con materiales ecológicos y técnicas sostenibles está ganando terreno como una alternativa responsable y eficiente en el sector inmobiliario.


El concepto de bioconstrucción ha tomado relevancia en los últimos años como una solución sostenible frente a los desafíos medioambientales que enfrenta el sector de la construcción. Esta metodología apuesta por materiales ecológicos, técnicas ancestrales y diseños que armonizan con el entorno, minimizando el impacto ambiental de las edificaciones.

La arquitecta Isabel Soto Luque, especializada en construcción sustentable, destaca que la bioconstrucción no solo responde a criterios de eficiencia y economía, sino también a una visión integral de respeto por el ecosistema. Su transición hacia este enfoque se originó en la búsqueda de alternativas a materiales contaminantes, lo que la llevó a desarrollar proyectos que combinan técnicas tradicionales con innovaciones modernas.

Uno de los principios fundamentales de la bioconstrucción es la adaptación al entorno natural. En lugar de modificar el paisaje para dar cabida a una estructura, esta filosofía busca integrarla de manera orgánica al medio ambiente. De este modo, se logra un mejor aprovechamiento de los recursos disponibles y una mayor eficiencia en el consumo energético.


Las viviendas bioclimáticas son un ejemplo de este modelo. Diseñadas para optimizar la captación de energía solar y mejorar la eficiencia térmica, estas construcciones emplean materiales como fardos de paja para aislación, madera proveniente de bosques gestionados de manera sostenible y lana de oveja como sustituto de aislantes sintéticos. Además, se promueve el uso de pavimentos permeables que respetan la integridad del suelo.

Existen diversos biomateriales que están revolucionando la industria de la construcción sostenible. Entre ellos se encuentran el adobe, un material milenario compuesto de tierra, arcilla y paja que ofrece una excelente aislación térmica; el cáñamo, utilizado en forma de bloques o paneles para mejorar la eficiencia energética; y el micelio, un material biodegradable derivado de hongos, que ha demostrado ser resistente y versátil en la construcción de paneles y ladrillos ecológicos.

También destacan las tejas ecológicas, elaboradas a partir de materiales reciclados o arcilla cocida, que ofrecen durabilidad y aislamiento térmico sin generar un alto impacto ambiental.


La bioconstrucción refleja un cambio en la forma en que las personas conciben el espacio habitable. Más allá de la selección de materiales, esta tendencia representa un compromiso con un estilo de vida que privilegia la armonía entre el ser humano y su entorno. En un contexto donde la sustentabilidad se ha convertido en un imperativo, la bioconstrucción se proyecta como una alternativa viable para el futuro de la arquitectura.